Corre, corre, Rompe-suelas,
que tu libertad anhelas
y que víctima no quieres ser,
aunque sabemos que vas a perecer
en una horrible y dolorosa muerte
pero nunca podrán vencerte.
Pues otro Afligido o Vulcano serás
y en nuestros corazones siempre estarás,
recuerdo de la más horrible vergüenza,
la misma lucha que recomienza:
que en lugar de entregarte a este mal llamado arte
la gente empiece, de una vez, a amarte.
Corre, corre, Rompe-suelas,
que aunque mucho me duelas
por perderte en ese torneo
donde te tildan de vil reo,
Llegará el día en que solo te suframos en la memoria,
que al final habremos alcanzado la triste victoria
de haber terminado con esa barbarie abismal:
Tordesillas, vergüenza mundial.
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